Proyecto de campaña política
La energía como derecho humano universal.

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No a la privatización de la Electricidad y el Petróleo.

La entrega y discusión de la reforma energética a las cámaras de diputados y senadores abre una nueva coyuntura política en México que puede ser utilizada de forma favorable para el conjunto del movimiento popular.

El incumplimiento de las promesas de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto y el carácter privatizador de su proyecto de Reforma Enérgetica nos dan un amplio margen para que las organizaciones políticas y sociales confronten su propuesta de reforma energética, la que traerá como consecuencia no sólo la aceleración en el proceso de privatización, sino que el encarecimiento de las tarifas eléctricas y un servicio con mayores deficiencias.

Ante esto, el movimiento popular democrático, debe adelantarse a los tiempos políticos de los órganos legislativos, iniciando una campaña por la Huelga de pagos en contra de las altas tarifas de CFE, en contra de la privatización y por una iniciativa de ley ciudadana que exija el acceso a la energía eléctrica como un derecho fundamental para todos los mexicanos.

En este sentido la campaña tendría dos diferentes argumentaciones político-jurídicas, una para la zona de atención de Luz y Fuerza del Centro y otra para el resto del país, sin embargo en ambas zonas se sustenta la campaña bajo la siguiente idea: Recibir la energía eléctrica debe de ser un derecho para el ciudadano y una obligación del Estado proporcionarlo. La electricidad en la actualidad es tan indispensable como lo es el agua, ya que gran parte de las herramientas diarias funcionan con electricidad, privar a una persona de la energía eléctrica es quitarle los medios para su subsistencia y la posibilidad de una vida digna.

Esta campaña política debe ir encaminada a cambiar la correlación de fuerzas en la discusión de la Reforma Energética, impulsando una amplia movilización popular que presione el debate en los órganos legislativos y no sólo impida la aprobación de una reforma privatizadora, sino impulse una iniciativa de ley que rescate el sentido social y nacionalista de la industria eléctrica y petrolera. Para lo cual tiene que articularse con las demandas y las acciones de las organizaciones que ya luchan contra el alza de tarifas eléctricas y el derecho a la energía como son la Asamblea Nacional de Usuarios de la Energía Eléctrica (ANUEE) y la Red en Nacional de Resistencia Civil contra las Altas Tarifas de Energía Eléctrica. Los usuarios en lucha son en potencia el principal impulsor de esta campaña. A diferencia de otras fuerzas            nosotros proponemos arrancar desde ahora y oponer un proyecto de reforma alternativa de carácter social y nacionalista.

De igual forma debemos reivindicar la lucha contra la Reforma Educativa llevada a cabo por Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación y la difusión y el fortalecimiento de la Junta Promotora para la construcción de la Nueva Central de Trabajadores, en este sentido consensar un plan de acción conjunto, que tenga como objetivos:

  • Generalizar la huelga de pagos en contra de CFE en la zona centro y el interior del país contra el alza de las tarifas y por el borrón y cuenta nueva.
  • Fortalecer y crear más comités y asambleas de usuarios de la energía eléctrica en resistencia y huelga de pagos.
  • Realizar asambleas informativas en colonias, municipios y delegaciones para informar sobre la Reforma Energética y sus afectaciones a la población incluyendo la problemática del alza de las gasolinas y el diesel.
  • Impulsar la iniciativa ciudadana para una “Reforma energética popular”, que se acompañara con la entrega de firmas apoyando esta reforma (2 millones de firmas), al inicio del próximo periodo de sesiones.
  • Realizar en el mes de Agosto  caravanas populares con las demandas de la Huelga de pagos y recolección de firmas en apoyo de la iniciativa ciudadana de reforma energética. Pueden organizarse desde cualquier territorio y podrían confluir con la movilización del 29 de Agosto.
  • La lucha en contra de la reforma enérgética privatizadora debe de ir más allá de la defensa de un dogma nacionalista y debe enfocarse en el esclarecimiento de las consecuentes afectaciones a la economía popular. Encarecimiento del servicio público de electricidad, el gas y las gasolinas, además del boquete  de más de 100 mil millones de pesos al gasto público.
  • La estructura territorial del SME debe reorganizarse para la realización de esta campaña. Debemos reasignar responsables del Comité Central y Comisión de Trabajo, rearticular a la base territorial de la organización en cada delegación o municipio y fusionarnos con el movimiento de usuarios en resistencia.

 

Para la zona centro del país además podemos esgrimir los siguientes argumentos:

  • SI NO HAY CONTRATO NO HAY TRATO. Al no existir nuevo contrato en donde se especifique las condiciones, derechos y obligaciones del contratante y del proveedor, no se podrá cortar el suministro de la energía eléctrica en caso de falta o huelga de pago. La CFE no ha hecho nuevos contratos porque en ese momento legalmente estaría convirtiéndose en patrón sustituto, y por lo tanto reconociendo la SME y sus derechos.

 

  • ALTO A LOS RECIBOS LOCOS. Los recibos de luz están llegando con cobros extremadamente altos, fuera de los consumos promedios de los hogares. Estan hechos en base a “lecturas estimadas” sin medición alguna del consumo real de los usuarios.
  • No está claro el destino de los pagos a CFE de quienes están cubriendo sus adeudos. ¿A dónde van a parar el dinero recolectado?
  • Se han incumplido las promesas de campaña de Peña Nieto de bajar las tarifas de la electricidad y de los combustibles (gas y gasolina). Antes bien, se siguen aumentando mensualmente con el consiguiente encarecimiento de los productos de consumo, entre ellos los de la canasta básica.
  • Protestar por insultante la condonación de 3,000 millones de pesos de impuestos adeudados por televisa. Se beneficia a una empresa cuyo dueño, Emilio Azcárraga,  tiene un yate con un valor de 179 millones de dólares.
  • En solidaridad con el movimiento del SME, injustamente despojado de su fuente de trabajo y víctima de la violación de sus derechos laborales y humanos por el gobierno federal.
  • En solidaridad con los maestros democráticos y sus luchas de resistencia por la defensa de la educación gratuita, laica y de verdadera calidad. Su oposición al intento de imponer la reforma educativa sienta las bases para la resistencia popular en contra de las contrarreformas neoliberales fiscal y energética.
  • En defensa de la economía popular por el no pago de la luz.

Estrategias, acciones y recursos generales.

Impulsar el acuerdo de todas las organizaciones populares de todo el país de promover la huelga generalizada de pagos de luz.

La campaña debe explicar las razones y la importancia de la huelga. Carteles, volantes, pintas, pegotes, articulistas en la prensa, conferencias de prensa, etc.
Contar con los abogados democráticos para la defensa de los consumidores y de confianza a la población.

Esta huelga de pagos se encuadra en la organización de la resistencia civil pacífica y busca incorporar a los sectores no organizados. Sirve para que la población adquiera conciencia y organización de que es posible oponerse con efectividad a las políticas del gobierno y a la corrupción de partidos, funcionarios, empresarios y de políticos.

Es importante la organización de la Huelga. Se inicia el día de la Jornada pero se promueve su incorporación permanente. Se pueden establecer módulos de orientación y adscripción a la huelga.

Diseñar una estrategia de organización territorial por colonia, barrio, comunidad y generalizar la Huelga de Pagos en todo el país. En el centro existe el recurso legal no así en provincia que tendría que ser suplido por la organización y la resistencia colectiva a los cortes de luz.

Es importante la participación  del MUP, los maestros y  sindicatos democráticos, las organizaciones estudiantiles, los curas y cristianos progresistas, inclusive valorar si también los partidos de izquierda.

La Huelga de Pagos de Luz puede llegar a ser la más grande e importante manifestación de resistencia civil en la historia contemporánea y un camino que incorpore a las grandes masas organizadas y no organizadas en contra del gobierno.